Entre la luz y la oscuridad.

Todo sucedió hace muchos años, en los confines del universo, donde las aves volaban libres por el viento y los cielos celestes se fundían en tonos naranjas y rosados. Era en ese rincón del planeta donde vivían los personajes que formaran parte de esta historia.

Época de caballeros decía la anciana, del barrio de las tejedoras de sueños, se dice entre murmullos de la gente, que son ellas las bellas mujeres de pelo blanco las que tejen tus sueños y los míos. En hilos de cristal que brillan en mil colores, arco iris perfecto de sentimientos.

Los días de sol eran interminables, las brisas de la tarde humedecían el ambiente dándole un olor de frescura, gracias al mar de la tranquilidad que se situaba al sur del poblado. Era un pueblo de artesanos, un lugar de mágicas historias, un puerto donde atracaban los barcos del honor, la justicia y la lealtad, cual escudo de armas de cualquier fortaleza.

Los días de plaza eran fantásticos, los pobladores se saludaban, platicaban, sonreían, algunos hasta lloraban, pero eran familia que era lo más importante. Unos a otros se ayudaban sin esperar recibir nada a cambio, únicamente recibir la sonrisa de agradecimiento, respeto, cariño de su amigo.

Los días cambiarían con la llegada de los vientos del norte, el mar de la tranquilidad sufriría trastornarnos inexplicables, los días de colores pastel y los cielos celestes se convertirían en horribles días grises, llenos de oscuridad.

Es aquí donde empieza la historia, donde la noche se volvió parte de la historia de este poblado, donde los habitantes de la provincia comenzaron a vivir atormentados, donde ya no era fácil conciliar los sueños, donde la maldad había llegado en los barcos de la muerte, el hambre, la peste y la guerra.

El maligno como se conocía al ser oscuro del universo, deseaba destruir las llanuras fértiles de la comunidad de la fe, miles de aliados de las cuevas de lo profundo se unían a la devastación de la tierra. Eran guiados por un hombre de mirada encendida, lleno de odio y capaz de asesinar la vida sin remordimientos.

En lo inmenso azul del cielo gris, Dios se preparaba a enviar aun ángel, una mujer, capaz de transformar vida, de dar vida, tenia que llegar a la tierra y salvarla del holocausto. Es aquí donde empieza la historia.